Cada vez que leo un buen libro, de esos que dejo lleno de tiritas de colores y me dicen que será llevado a la pantalla grande me debato entre las expectativas que crea la curiosidad y el miedo a lo que un director pueda hacer con esta obra a la que obviamente le he tomado aprecio o como en ocasiones me sucede se convierte en un libro de referencia o uno de culto.
Cuando
Ayer aprovechando la coyuntura del festival de cine francés me animé a ver la versión cinematográfica del libro llamada El Erizo, vencí el miedo…y no me defraudó. No quisiera aburrirlos con los detalles técnicos (a los que deje a un lado para simplemente disfrutar) si nos mas bien hablarles del sabor que dejo en mi boca. El Erizo devolvió las mismas lagrimas que me arrancara el libro y aunque ya sabia como terminaba todo, no dejé de sumarme al estupor general cuando sucede lo que sucede (hahahahaha se que esta parte esta muy profunda, pero me gustaría respetar a lo que aun no han leído el libro o visto la película); el gusto de ver como se trató fielmente la historia y el ambiente donde se desarrollaba la trama, el detalle de la animación como elemento simbólico para acercar al publico que no había leído el libro al ¨ complejo ¨ mundo de Paloma, la pasión escondida por la lectura de Reneé y la cultura japonesa transportada a Paris por Ozu… pero mis más grandes gracias a Jorge, por poner en mis manos este libro, por existir en mi vida y en la vida de todos…
Un beso y un abrazo
p.s: si alguien quiere regalarme algo que me regale la belleza del erizo, no quiero la del photoshop ; p